Autor: Cristian Alarcón
Editorial: Grupo Norma, 1ra ed. 2003
“Cuando me muera quiero que me toquen cumbia / y que no me recen cuando suenen los tambores / y que no me lloren porque me pongo muy triste / no quiero coronas ni caritas tristes / solo quiero cumbia para divertirme…”
Con esa letra y los acordes de la cumbia colombiana homenajeará Simón a su amigo “el Frente” cuando se entera que fue asesinado por la policía. Era la canción preferida de su amigo y Simón creyó que la mejor forma de recordarlo era escuchándola mientras se fumaba un porro ya que no podía asistir al velorio porque estaba internado en un Instituto de menores.
Cuando me muera quiero que me toquen cumbia es un libro que tiene tintes de crónica periodística pero también de novela de ficción, a pesar de que narra hechos reales. En sus páginas se presenta la investigación del periodista chileno, Cristian Alarcón, sobre la vida de un pibe chorro que se transformó en una especie de mito, de ídolo pagano protector de los pibes chorros capaz de “torcer el destino de las balas”.
Victor Manuel “el Frente” Vital murió el 6 de febrero de 1999 luego de una persecución policial. Fue acribillado por cuatro disparos por parte de un policía de la bonaerense cuando ya se había entregado a la policía. Desde su muerte nace el mito. En las villas de San Fernando (la Esperanza, la 25 de mayo y la San Francisco) todos recordarán al Frente como un héroe y se encomendarán a él siempre que salgan a “laburar” (porque consideran que robar es su trabajo) y le agradecerán su protección llevándole a su tumba cerveza y marihuana.
En cada capítulo Alarcón va adentrándose más en la vida del Frente, en lo que fue en vida para que después de muerto llegase a convertirse en un mito. Pero, además, irá metiéndose adentro de la villa, con todo lo que eso implica: en sus problemas, en sus miserias, en sus celebraciones. Es un libro que te deja pensando y que presenta un mundo lleno de Crimenes perceptibles, al igual que nuestro programa radial.
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